De calaveras y punkrockers.

Por fin ya he visto publicado una de las sensaciones tebeísticas de la temporada undergraun: el libro Mortland, una de esas pocas ideas acojonantes que al final se ven realizadas. La idea surge de Ultrarradio, la editorial que se han sacado de la manga Davín y Puño para publicar exclusivamente los cómics de la gente que les gusta. Me escribieron hace tiempo para liarme en este proyecto, un libro colectivo de comics mudos donde todos los personajes debían ser calaveras, además de otras reglas que había que respetar(o no). Al final el tema ha quedado muy de artistas, a veces chocante, otras divertido, siempre inquietante y con mucha oscuridad. Merece la pena tenerlo, y ya sabéis que aquí en Granada el bueno de Paco de Subterránea es el que se encarga de distribuir todo este material exquisito. Pues aquí tenéis las tres primeras páginas de mi cómic.El tema es bastante sanguinolento y algo tétrico, pero me puse a practicar la asociación libre de conceptos ateniéndome a las premisas que me dieron y esto es lo que salió. Advierto que el final responde a las incógnitas, no es como ese pestiño de LOST:

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Casi he gastado la tableta wacom haciendo rayitas y rascaduras pero era un estilo que me apetecía experimentar, ir un poco más allá en el expresionismo aprovechando las tramas manuales.

Por otro lado y cambiando de tercio hoy me he echado unas buenas risa con este disco, que hace tiempo que buscaba y es una de las mayores rarezas del rocanrol español. Se trata de un lp que salió en 1978 con una banda de estudio anónima que se copiaba enterito el Never Mind the Bollocks de los Sex Pistols para venderlo en los puestos de los mercadillos aprovechando el tirón de Johnny Rotten y Cia, que estaban de moda en aquellos años.


Una obra maestra del trapicheo nacional, en la carpeta del disco vemos que esa compañía lo mismo vendía discos de un imitador de Julio Iglesias que lo de estos "Punk rockers" de pacotilla. No se sabe a ciencia cierta qué formación era ésta que se pasaba por el forro los mayores himnos del punk, pero las malas lenguas apuntan que eran los mismísimos Asfalto que por aquellos años trabajaban como banda de estudio.
El sonido es bastante bueno, pero la calidad musical es nula, la guitarra suena como una radio pequeña y lo mejor de todo es el cantante que no tiene ni puta idea de inglés y en ocasiones se le va la olla cosa mala.El coro final de "God save the queen" cuando el notas grita "Nofiutar" es mítico.

Para descarga directa:

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