A principios de diciembre del 2009 fallecía en Córdoba un gran pintor nacido en mi pueblo:
Paco Serrano Velasco. Por desgracia yo nunca llegué a conocerlo a fondo,me vine para Granada y él se quedó en Córdoba, pero las pocas veces que hablé con él en mi adolescencia sin duda me dejaron huella.Era uno de esos tipos que no se olvidan, alguien que siempre tenía algo importante que decir, una sensibilidad especial, radical y al mismo tiempo muy sentimental. Tenía un carácter difícil y no soportaba las tonterías ni las medias tintas, sobre todo en lo referido al arte.Si existe eso que llamamos genio o talento innato él lo tenía, pero esa sensibilidad natural y esa entrega total a la pintura también le trajeron la soledad y una vida casi de ermitaño, agravada por sus problemas de salud en los últimos años.
Este verano me llamaron de la redacción del libro de feria de Fernán Núñez, le querían hacer un pequeño homenaje y me pidieron una colaboración.Acepté de inmediato, y como sabía que otros artistas podrían hablar más extensamente de él como persona y amigo, me limité a una página de comic y texto donde explicara mi limitada experiencia con Paco y mis sentimientos hacia su pintura.
Al final eso es lo mejor que nos deja un artista de este calibre, su gran obra,Paco ha muerto pero sus cuadros terribles y hermosos estarán por siempre para mostrarnos ese otro mundo con el que convivía a diario.
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